Hoy en día hablar de un dictador es hablar de un ser oscuro, infame y claramente nocivo para la humanidad. ¡Pero no siempre fue así! En tiempos de la república de Roma, conscientes de las deficiencias del sistema de contrapesos de los cónsules, se decidió crear la figura del «dictator». Un cargo reservado para situaciones de extrema necesidad, donde un ciudadano romano de reconocido prestigio sería nombrado dictador, asumiría poderes máximos y una vez resuelta la emergencia o pasados seis meses, devolvería su cargo y sus poderes al senado. Los dictadores fueron en muchas ocasiones, las más, ídolos del pueblo, en otras villanos que aprovechando la coyuntura usurpaban el poder, se revelaban contra la metrópoli y se autonombraban dictadores vitalicios.
Desgraciadamente, el lenguaje evoluciona, se deteriora y en algunas ocasiones se corrompe.
Desconocer el origen del mismo nos hace cometer errores imperdonables y errar los argumentos.
Hoy, desde el corazón de la ruta de la seda, hablamos de China. Ni dictadura, ni comunista.
Spoiler de mi libro
Tenía un prólogo preparado para un episodio donde hablaré de la democracia donde pido tolerancia, apertura de miras, sentido crítico y una mínima disponibilidad a cambiar de opinión. Cómo sé que los oyentes de Lejano Este son tolerantes, están dispuestos a escuchar, a debatir, a disentir también, cómo no, a confrontar opiniones y argumentos desde una actitud dialogante… Lo dejo aquí y me voy directo al tema.
Este episodio es un spoiler de un libro que estoy escribiendo… Que espero terminar algún día, pero que quiero dejar ya aquí patente, para que algunos comunicadores que me siguen, que se dedican a publicar sobre China basándose en artículos previos míos, aprovechando de forma muy inteligente su mayor exposición, periodistas también que te ningunean y en lugar de entrevistarme se “inspiran» en mis artículos… Pues quería facilitarles su trabajo y que tengan más y mejores temas de los que hablar.
La dictadura comunista china, ni es una dictadura, ni es comunista. ¡Empezamos!
Los tópicos chinos de siempre
Es realmente cansino rebatir a los que siguen pensando que en China hay niños cosiendo balones 16 horas al día. Siempre digo que como en Europa no ha pasado nada en los últimos 30 años, nos parece que en el resto del mundo tampoco. Y cuando mis clientes llegan al aeropuerto alucinan con las autopistas, los rascacielos, etc. Realmente me sigue sorprendiendo que sorprenda. Como si pensáramos que los chinos siguen viviendo encima de los árboles.
Y cuando les pregunto que pensaban antes de venir a China… Cuando los chinos iban a su país, compraban sus fábricas, sus equipos de fútbol, sus minas… Cómo puede ser que con tantos imputs, sigan sorprendiéndose al llegar a China… No saben qué responder.
A veces les ayudo a auto-justificarse y les digo que, claro, lo que pensamos es que el país es rico pero la gente es pobre… Y entonces comulgan: «sí sí, eso es» encuentran la vía de escape… Pero entonces? Por qué peleamos por el turista chino que desde hace años es el mayor consumidor en países como Francia, por qué los estudiantes chinos copan las mejores universidades y cuando digo mejores digo las más caras… (si tu universidad no está repleta de chinos, es porque no es lo suficientemente buena), ¿no nos damos cuenta que el verso de gobierno rico pueblo pobre ya no se sostiene?
La primera potencia del mundo a nivel tecnológico
Y siento si aquí blasfemo y dejo atrás a los todopoderosos norteamericanos… Pero igual que la riqueza no es el ingreso, ni tan si quiera patrimonio sino capacidad de consumo… La tecnología no es creación de la misma que ahí andarían empatados sino consumo de la misma… Y ahí China barre. Claro, ¡barre porque son más! ¡¡Que no!! Barre en números absolutos pero también en porcentuales. Con más penetración, más uso, más horas de consumo, más gasto, de verdad… Cuando veo a los americanos pagando con tarjeta… Ya no cash, que me retrotrae al S.XIX, pago con tarjeta… Que se usaba como argumento de subdesarrollo en la China de principios de siglo para explicar lo retrasados que estaban… Pues bien, ellos pasaron del cash al dinero electrónico no hoy donde todos podemos pensar que más o menos lo vamos implantando, hace muchos años.
Ha sido un crecimiento tan exponencial que no somos capaces de digerirlo y nuestra mente se ha quedado clavada en el pasado con información caduca. Las tarjetas de crédito, en su día quizá significaban modernidad… Pero, repito, no hoy donde todos más o menos podemos coincidir, hace muchos años que en China las vemos como un dinosaurio testimonio de la lentitud occidental.
Recuerdo, hablando de dictaduras… Cuando mi mejor amigo me dijo una vez: «sí sí, pero algún día los chinos querrán vivir como nosotros”, amparado todavía en la versión obsoleta del operario de fábrica esclavizado, trabajando por un bol de arroz que veía Europa como el futuro. Mi respuesta fue, perdonarme el tono pero es un amigo personal y la confianza me lo permitía… Le respondí: «¿Qué te hace pensar que un chino quiere vivir como tú?» Cobrando 700 euros, comiéndote dos horas de atascos al día, volviendo a vivir con tus padres porque la aventura de irte a vivir solo resultó insostenible…
Los chinos quieren ser ricos
Los chinos quieren ser ricos. Y te lo dicen así. Estarán equivocados, estarán malacostumbrados a ese crecimiento del 10-12% que ya nunca más volverá… Estarán viciados por esa década donde escupías en el suelo y nacía una flor… Sí, honestamente creo que la generación de menos de 35-40 tiene un problema porque ha vivido una época increíble… Y lo peor es que no han vivido ninguna otra ni se han educado lo suficiente para entender que aquello fue una excepción y no la norma… Y nunca volverá. Más o menos como el engaño de la clase media de la España de los 90.
Habrá una generación frustrada… Es cierto, que no conseguirá sus objetivos, porque… hablo con muchos dueños de fábricas que te dicen: «Si yo monté un imperio con 5.000 trabajadores… Sin si quiera estudios primarios, imagínate mi hijo que he enviado a Harvard y va a heredar todo esto y lo va a multiplicar…» Pues, cuando tengo la confianza y me piden consejo… Les suelo decir que no, que su hijo probablemente les arruine o en el mejor de casos conseguirá mantener lo que le deja el padre, pero que sería bueno controlar las expectativas, porque su hijo va a vivir en una China infinitamente más competitiva que la que vivió su padre.
En cualquier caso, volviendo a lo de “algún día querrán vivir como nosotros”, me dice mucho de ese ombliguismo eurocentrista… Que vive más del pasado que del presente… Y China, pese a toda esa generación de hijos únicos que acabará frustrada por esas expectativas desorbitadas de sus progenitores… Esa pasión, esas ganas, no de ganar dinero, no de ganar, 5.000, 10.000$ mensuales… Esa misión vital de ser rico… Eso, hace este país imparable. Muchos caen pero los que llegan, mueven el país de una manera con la que salvo Estados Unidos y ese sueño americano que todavía compite con China, pocos lugares más en el mundo, son capaces de competir.
Falta de información, ¿ellos o nosotros?
Cuando decimos tan alegremente que en China hay una falta de información total, que la hay, deberíamos ser más intelectualmente honestos, mirarnos el ombligo y ver también nuestras deficiencias y nuestros sesgos.
Y centrándonos en el tema: Por qué digo que China no es una dictadura. Básicamente porque no hay dictador. De nuevo, no nos quedemos en Mao y en el comunismo Chino de los años 50 y 60… Hagamos un pequeño update a nuestra base de datos, porque está ligeramente obsoleta.
¿Qué es un dictador?
Un dictador es la persona que se arroga o recibe todos los poderes políticos y, apoyada en la fuerza, los ejerce sin limitación jurídica. Podemos decir que el presidente chino tiene muchos poderes, desde luego… Está a años luz de no tener limitaciones jurídicas. O entendemos que el poder está en el partido o no sabemos lo que es China y estamos incapacitados para debatir. A día de hoy, mañana ya veremos.
La definición más completa de Dictadura que he encontrado sería: “Forma autoritaria caracterizada por un solo líder o grupo de líderes sin partido o con partido débil. Lo opuesto a lo que es China.
El problema y vayamos a la raíz, es que nos han educado con dos palabras: «democracia y dictadura» y todo lo que no es lo uno es lo otro. Blancos y negros para que los analfabetos de la posguerra española supieran votar bien… Una vez que murió el dictador.
¡Evolucionemos!
Después decimos que el español es un idioma rico… Pues si es tan rico, no lo abaratemos de esta manera tan burda y utilicemos toda su variedad. Porque tenemos un espectro tan limitado que cuando argumento que China no es una dictadura, es imposible acabar el argumento. Sea cual sea el integrista que tengas en frente… Se enajena, entra en colera o le explota la cabeza porque no puede entender que pongas en duda esa verdad absoluta.
En serio, ¡que no argumento esto en defensa de China lo hago en defensa del lenguaje! (Estoy recientemente indagando sobre la escucha activa… Y realmente, es algo que nos falta… muchísimo, a mí el primero. El no estar intentando contraargumentar cada frase, con el botón pulsado… Sino, concentrar todos tus sentidos en el argumento del otro, intentando entenderlo, empatizar… En fin todo un arte, que escasamente practicamos).
Regimen totalitario
Pues volviendo al tema, por desgracia, no intento defender el modelo chino cuando afirmo que aquí no hay dictador, simplemente, trato de hablar con propiedad. Si queremos atacar el modelo podemos hablar de régimen totalitario, que aquí sí, si nos vamos a su descripción habla de un régimen de partido único… Y nos sirve para seguirlo criticando si ese era el objetivo cuando hablamos de dictadura. Es decir, es compatible criticar a China y hablar de forma correcta.
Y entonces por qué a veces se habla de «dictadura de partido único”… Se habla así igual que podríamos hablar de monarquía de partido único. Es incorrecto. Podríamos decir que es una democracia de partido único, en este caso intentando blanquear el significado… Todo sería incorrecto.
Se entiende que utilicemos estas variaciones para enriquecer un texto y no repetir continuamente las mismas palabras. Para esto nos sirven las figuras literarias y con ellas llamamos a un jugador gladiador, káiser o mago… Pero no lo son y sabemos que no lo son. El caso es que en el deporte tenemos claro que no lo son, parece de perogrullo tener que explicar esto pero en política, debido en algunos casos a nuestra escasa formación, se empieza a repetir un mismo término y cuando no se sabe de dónde ha salido, se acaba dando por sentado como verdad absoluta. De forma simbólica podemos decir lo que queramos, de forma estricta no.
Corea del Norte, monarquía hereditaria
Este tema me parece muy similar a cuando se dice que Corea del Norte es una monarquía hereditaria. Y esto se hace también por el desconocimiento del significado profundo de lo que es una monarquía. Una monarquía no es una dictadura hereditaria. Se pueden parecer pero son conceptos distintos, de nuevo, no abaratemos el lenguaje. Se que me salgo del tema principal pero ya que estamos convirtiendo este episodio en una clase de politología, profundicemos y acabemos de delimitar los diferentes términos.
Una monarquía se diferencia de otras formas políticas no por su carácter hereditario, que se puede dar en otras instituciones sino por su legitimidad o si queréis “supuesta” legitimidad. Qué significa esto? Que una monarquía está legitimada por líneas de sangre. En una monarquía no hereda el reino el hijo hereda el reino quien esté legitimado por sangre, habitualmente el hijo, pero no necesariamente. Y me diréis: ¿qué diferencia hay entre el carácter hereditario y la legitimidad hereditaria? Pues algunas muy sustanciales.
Si en algún momento el monarca muere, se busca a la persona legitimada por la línea de sangre para heredar. Pensemos por un segundo: ¿por qué las monarquías han sido históricamente tan estables y han hecho frente a muchas menos revoluciones que las democracias, por ejemplo? Por una razón muy simple, porque eliminando al rey, no te podías colocar tú al frente del estado. Y se que se os ocurrirán muchas excepciones a este argumento, pero no reduzcamos la historia a los últimos 300 años, pensemos en toda la historia de la humanidad, dejemos un momento de lado nuestro eurocentrismo y pensemos en África, en Oriente medio, en Asia… Las monarquías han sido los periodos más estables de la humanidad, nos gusten o no, ¿eh? Ese es otro tema. Sólo me dedico a analizar.
Incentivos para asesinar al rey
Por qué era infructuoso dar un golpe de estado, pensemos siempre en una de las palabras más importantes en la historia del ser humano: incentivos. ¿Por qué yo como plebeyo no tenía ningún incentivo a asesinar al rey persa? Porque asesinando al monarca, la aristocracia dominante lo que haría es buscar un sucesor entre los legitimados por línea de sangre. Yo tendría 0 opciones de llegar al trono. Esto no es una tribu bárbara donde desafiando al líder a un combate a muerte… Puedo llegar al trono. Ahí si había revueltas continuamente. Un rey podía ser una persona sin ningún tipo de formación en el combate, su lugar no estaba legitimado por sus habilidades de esgrima o de combate cuerpo a cuerpo. Si os fijáis, la mayoría de asesinatos de reyes durante la historia se producían a manos de su pareja, hermanos o hijos… Que eran los legitimados para gobernar. En casi cualquier otra forma política, imaginemos una república donde no hay una legitimidad sanguínea, existen muchos incentivos a dar un golpe de estado porque la legitimidad viene dada por la fuerza, por el control del senado o por otros factores.
Si entendemos esto, que es un concepto capital para entender las monarquías, comprenderemos por qué jamás podríamos llamar a Corea del Norte monarquía hereditaria. No basta con que se pasen el supuesto trono de padres a hijos… No están legitimados por línea de sangre sino por la fuerza de las armas. Y es muy fácil entender la diferencia. En el momento en que haya un golpe de estado o una revolución acabe con el líder actual, no pensarán: «busquemos un hijo que pueda gobernar o en su defecto un sobrino…». No, para nada, por poder… Podría suceder, pero también es probable que un militar disidente ocupe el poder, que se instaure una democracia, que un general afín recupere el poder para que la casta dominante continúe al mando… Vemos que aquí la legitimidad viene marcada por la fuerza, el control de las armas o similares. No va a haber un sobrino segundo en el exilio, que 20 años después reclame el trono porque tiene derechos sanguíneos sobre Corea del Norte. No sé si vemos la diferencia.
En las temporadas en las que he vivido en Georgia, conocí al entorno del príncipe de Georgia… Que es una de las casas más antiguas de Europa… Y te choca porque piensas que Georgia es una república, que antes era una república socialista soviética… Y dices: “¿y esta gente? ¿Cuándo han mandado aquí?”. Pues hace mucho tiempo, pero ellos legitimados por su línea sanguínea siguen ahí.
Nos puede parecer más o menos ridículo, anacrónico, pero a ellos se les respeta muchísimo en Georgia, tienen su público y explotan esa supuesta legitimidad sin necesidad de usar la violencia.
Me he ido un poquito del tema pero creo que era interesante utilizar el tema de Corea del Norte como ejemplo de las situaciones donde distorsionamos el lenguaje para intensificar un argumento que me parece bien como herramienta lingüística pero siempre que seamos conscientes de que es incorrecto, que es una manera de hablar, una figura literaria, una licencia que nos tomamos… Si es así, todo perfecto.
¿Dictador vitalicio?
La última que me comentaban hace poco en una cena con ciudadanos españoles en Shanghai… Me decían: «¿no ha cambiado la ley Xi Jinping para ser un dictador vitalicio y entonces sí podríamos llamarle a esto dictadura?»
Bueno, para empezar, llevamos llamando dictadura a lo de China desde Mao, con lo que no me serviría como excusa para justificar el error conceptual. En todo caso, sería un error, que accidentalmente se transforma en realidad.
Decir que el Reino Unido no forma parte de Europa es erróneo y aunque en algún momento el «Brexit» se haga realidad y mi error pase a ser una certeza, no quitará que durante muchos años la afirmación fuera un error.
¿Tenemos realmente sentido crítico?
Pero es que lo que les respondía cuando me comentaban esto es que engullen el marketing americano felices y ¡piden más! La Razón lo titulaba “La asamblea china otorga poder perpetuo a Xi Jinping”, otro artículo titulaba “el nuevo emperador” y todo tipo de titulares en esa línea. Obviamente, la prensa es un negocio, lo se bien, porque como os decía en episodios anteriores, si no la digo muy gorda mi entrevista se olvida en un cajón… Y ufff, la verdad es que hablar de emperador, poder perpetuo, etc. Son titulares golosos… Se ganarían mi clic. Y al final de eso viven, de los clics, no de informar. Recuerda que cuando algo es gratis, el producto eres tú. Tú no eres el cliente, el cliente es la empresa que se publicita… Tú, repito, eres sólo el producto. Y esos titulares, sensacionalistas son… La máquina que fabrica productos. Y si tienes una máquina menos sensacionalista… Pues fábrica menos unidades, vendes menos y eventualmente cierras.
En serio, si… de nuevo, despasionalizamos el tema, desadjetivamos y contamos la información y no lo que deducimos, lo que nos gustaría o lo que nos interesa comunicar… En realidad lo que objetivamente ha sucedido es que se le ha retirado el límite de dos mandatos al presidente chino. Así de aburrido lo contaría yo. Claro, aquí no clica ni Dios.
¿Por qué iba un totalitarismo iba a limitar su propio mandato?
Pensemos que el límite de dos mandatos, no es un invento de los totalitarismos, ¿qué sentido tiene si son totalitarios? Es un invento de las democracias al observar sus propios defectos. Y muy pocas democracias lo aplican, ahí quizá tendríamos que fijar nuestra caza de brujas y no en los totalitarismos. Siempre tomamos como ejemplo a EEUU pero… En España Felipe González fue presidente durante 14 años… José Bono o Jordi Pujol fueron presidentes de su comunidad durante más de 20 años… En fin, nadie que accede a un cargo sin límite de mandatos se le declare emperador, ¿cierto?
Pero es tan confuso el argumento que, lo que nos debería hacer pensar es de qué clase de dictadura hablábamos antes si ni siquiera podía estar más de dos legislaturas en el cargo. Menudo dictador de cartón-piedra. ¿No nos damos cuenta que lo normal en una dictadura o un totalitarismo es esto? Lo anormal es que haya limitación. Será porque quiero ver el vaso medio lleno, pero más que criticar que ahora no haya tope, valoro muchísimo que antes sí lo hubiera. Contradice muchas de las cosas que pensamos sobre el partido… Y como a pesar de su adoración a Mao, fueron muy conscientes de los riesgos y favorables a los contrapesos.
¿Por qué sobreactuamos en la crítica?
En fin, en cualquier caso, como decía, no se ha perpetuado para siempre, no es un nuevo emperador… Esos piropos yo los dejaría para presidentes demócratas que no hay quien los levante de su silla… Para un dictador o en este caso, el líder de un régimen totalitario… No aporta mucho como crítica decir que se perpetúa en el cargo, repito, ¡es un régimen totalitario! Y no lo recubren de democracia como sí se hace en otros lugares, ¿qué nos aporta exagerarlo? Si es tan importante, que parece que sí, dividamos el mapa de países que odiamos entre los que tienen totalitarismos con límite de mandatos y totalitarismos sin límite de mandatos. De paso ya, como sugerencia, si es tan importante, dividamos también las democracias por el mismo patrón, para saber cuáles son de primera y cuáles de segunda.
Cómo sería un debate con un argumento debidamente estructurado
Si lo que en realidad queremos decir es que el totalitarismo del partido comunista se tambalea porque su líder ha cambiado la ley con el propósito de colocarse como dictador vitalicio… (ojo, no he leído en ningún lugar el argumento debidamente estructurado), podría ser interesante ese debate. Pero antes de empezar… dicho debate podríamos extraer dos lecciones muy interesantes, una, que como intenta explicar este episodio, si lo que me decís es que estamos pasando de un totalitarismo a una dictadura… Lo que estamos admitiendo de facto es que llamarlo dictadura ha sido erróneo, que es mi tesis, y la segunda lección que extraería es: qué preocupados estamos en Occidente por la buena salud del partido y de su totalitarismo de repente… Poniendo el grito en el cielo por esta ley. No sabía que teníamos tan buena relación con el partido comunista chino y nos interesaba tanto su mantenimiento. Sobre todo porque habitualmente sólo compartimos noticias negativas sobre ellos, ¡pero ahora me quedo mucho más tranquilo!
Realidad vs Potencialidad
Focalizándonos en el presidente: Xi Jinping no es culpable de nada, de momento. Sólo se le ha dotado de la potencialidad para ser culpable. Que yo te conceda una licencia para portar armas no te convierte en un asesino. Quizá te esté dotando de la potencialidad de serlo, no digo que no… Tus acciones te convertirán o no en un asesino… Como siempre, el tiempo dará y quitará razones.
La pregunta inteligente y desapasionada, quizá sería: «¿Por qué el partido le otorga ahora esta potencialidad?». Más aún si como decíamos antes, ¿fue una norma creada por el propio partido como un sistema de contrapesos?
Pues lo que os puedo decir es que entre bastidores se comenta, nos lo podemos creer o no, que llevan décadas buscando un gran líder y no lo habían encontrado hasta ahora. O bien no era un gran orador, o bien no tenía el liderazgo suficiente o bien se salía de la disciplina del partido… Una vez lo han encontrado, no quieren perderlo y volver a la inestabilidad pasada y las tensiones internas que se producen al elegir líder cada pocos años.
Los retos de China sin prisas
China se enfrenta a retos colosales, antes del año 2049, el centenario de la llegada del partido comunista al poder, aspiran a convertirse en la primera potencia del mundo y la estrategia tiene que ser clara, única y focalizada.
Siempre explico que el concepto de la prisa, es un fenómeno occidental. Todo lo tenemos que hacer deprisa… Y llevándolo a la política, todo hay que hacerlo en 3 años y medio, para poder vender el éxito en las próximas elecciones… Que es el objetivo único.
Si no queremos que siga no seguirá
Los chinos, pueden esperar. Y crear planes a 10, 20 y 30 años vista. Esa es una ventaja considerable… Y bueno, pensando en eso, se puede entender, aunque no comulgues, en la idea de deshacer el límite de mandatos. Que, ojo, los mandatos se seguirán produciendo, se auditará la gestión de Xi Jinping cada 5 años… Y lo que se piensa es, si queremos que siga seguirá y si no queremos que siga, no seguirá. Qué sentido tiene que nos pongamos trabas a nosotros mismos sí, llegado el caso, entre todos decidimos que siga pero la ley no nos lo permite.
No entro en el acierto o desacierto de la decisión. Yo dejo los análisis sensacionalistas para los que viven de ellos. Como decía aquel: “Un político es aquel que se dedica a vender las almas de sus ciudadanos y un periodista es aquel que se dedica a lo mismo, pero por un poquito más del salario mínimo”.
Y si de aquí a 15, 20, 30 años… No hay quien lo mueva del sillón será porque se ha convertido en un dictador y ha conseguido subyugar los contrapesos del partido. Y si de aquí a un tiempo, colocan a otro de presidente, nadie dirá: “Ah pues no, nos equivocamos y estuvimos contribuyendo a desinformar”. Qué más dará entonces, ¿verdad?
El partido más fuerte que nunca
Con la información que tengo, es cierto que Xi Jinping es uno de los líderes más poderosos desde Mao (me dejo en la manga la carta de Deng Xiaoping porque le dedicaré un episodio pronto), pero también os digo que nunca he visto al partido tan fuerte como lo veo ahora… Y el presidente lo será mientras no saque los pies del tiesto. Siempre digo que en China importa el hormiguero y no las hormigas… Y si tienen que sacrificarse algunas hormigas por el bien del hormiguero a nadie le tiembla la mano. Esto aplica a la hormiga obrera y aplica a la hormiga reina. Porque en China, como… repito, no es una dictadura, por el bien del hormiguero se pone y se depone a la hormiga reina cuando sea necesario.
Y si en algún momento esto cambia… os doy mi palabra, cambiaré de opinión.
La segunda parte del título, lo de ni comunista… Es otro melón que abriré en un próximo episodio. Pero ya veréis que en ese estáis más de acuerdo.
Os dejo con un proverbio chino:
«Existen dos maneras de juzgar a alguien, escuchando lo que dice u observando lo que hace».
听其言,观其行
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Me gustó mucho la forma de tratar este tema… Soy un gran admirador de China en todo su proceso histórico, filosófico y político..
¡La persona real!
¡La persona real!
Hola, Fernando
Muchas gracias por tu comentario. Si me permites, te invito a aprender mucho más sobre China con el Lejano Este, el podcast personal de Adrián Díaz, nuestro CEO. Puedes encontrarnos en tu plataforma preferida: iVoox, iTunes, Spotify o Youtube. Te dejo el enlace directo a iVoox: http://bit.ly/LejanoEste
Saludos,
Carlos Gómez
Hola buenas tardes,me ha encantado muy bien explicado,esto me recuerda en mis tiempos cuando viví en Alemania,para muchos solo conocían a España, torero,flamenco decían los germanos,gracias por la aportación ha conocer mas China