Nueva ruta comercial china a través del Ártico

Debido al derretimiento del hielo- posiblemente provocado por el cambio climático- aumentan los  intereses de diversos países en las zonas polares, destinando sus presupuestos para el envío de barcos de expedición por motivos científicos.

Actualmente, existen dos posibles rutas: siendo uno, el paso Noroeste (navegable desde el 2007 y el más usado como vía marítima mundial de tránsito de embarcaciones militares y de investigación) y el otro, el Noreste.

El año pasado China volvió a mandar su rompehielos Xuelong o “Dragón de la Nieve”, convirtiéndose en el primer navío chino que finalizó con éxito esta expedición ártica. Dicho buque comenzó sus expediciones en las zonas heladas en el año 1999, seguido del 2003, 2008 y 2010 con el objetivo de poder estudiar la oceanografía física, la biología marina y la química, además de poder instalar una estación meteorológica y buscar la presencia de metano en la región.

Su último viaje, se inició en el mes de julio del 2012, saliendo del puerto de Quingdao y realizando un trayecto desde el Pacífico hasta el Atlántico usando la vía del Noreste ártico (bordeando las costas siberianas), con una duración de 3 meses y una distancia equivalente a 18.500 millas náuticas (34.300km) y otras 5.300 millas náuticas en la zona helada.


Tras esta expedición, el gigante asiático prevé que para el verano del 2013, podrá ser el primer país en utilizar el atajo de la ruta del Noreste con fines comerciales (rumbo a Estados Unidos y Europa). Siendo esta vía la más corta en comparación con el Canal de Suez (la ruta comercial actual más utilizada, cuyo recorrido entre Shanghai a Hamburgo  son unos 20.400km), pudiendo navegar sólo 14.800 km; es decir, unos 5.600 km menos.

Según Huigen Yang, el director general del Instituto de Investigación Polar Chino (IIPC), esta ruta supondría un ahorro en costes de transporte (reduciéndolo un 20%) y también acortaría en tiempo y distancia. Además, calcula que para el año 2020, el 5-15% de las rutas comerciales chinas procederán de esta vía.

Muchos países también han quedado atraídos con esta nueva idea y están planeando enviar barcos para la exploración de nuevas zonas de petróleo y gas además de algunas zonas mineras, al ser un área rica en recursos naturales y cuyas condiciones todavía no están en disputa.