¿Por qué vienen los chinos a España? O a Italia, o a Argentina… A cualquiera de vuestros países.
Es una pregunta que me hacen mucho. ¿Si dices que tan rica es China porque los chinos están deseando escapar de allí para venir a España? Y me parece una pregunta pertinente teniendo en cuenta la realidad que explico sobre China, antagónica a la que cuentan los medios oficiales… Que describen China como… Poco menos que un infierno con patas del que todo el mundo está deseando salir.
En este sentido, casaría más esa versión oficial con lo que se percibe en nuestros países. China va mal, es una pesadilla de país por tanto la gente hace lo posible por salir y venir a vivir al primer mundo donde se vive mejor.
Ceguera occidental
Bien, empecemos negando la mayor. Los chinos no vienen a España. «¿Cómo?» Quedaos, que ahora os daré cifras. «¿Cómo que no vienen a España… Pero si está esto lleno?» Recuerda, frase buque insignia de este canal: que hasta la pandemia no hubiera pasado nada en occidente en los últimos 40 años, no significa que no hubiera pasado nada en el mundo.
Se cayó el muro de Berlín, la Unión Soviética se deshizo, un montón de territorios de la Europa del Este empezaron a crecer brutalmente… A veces me quejo de la poca información que tenemos sobre China, pero viendo durante esta guerra que la izquierda se ponen del lado de Putin y la derecha piensa que hay que combatirle porque así combatimos al comunismo… La sensación que me llevo es la misma, que vivimos anclados en realidades de hace 40 años que nos dificultan mucho entender las problemáticas actuales. «¿Cómo se han puesto a tirar bombas? ¿Con lo bien que vivían en paz?» No, no, que a nosotros no nos interesa en absoluto lo que allí estaba pasando no significa que no estuvieran sucediendo cosas.
Lo mismo en China, de la que sabemos que había un tipo muy malo mandando parecido a Franco pero de izquierdas, después nos suena algo de unos tanques pisando estudiantes y lo siguiente que sabemos es que celebran unas olimpiadas y que son un peligro para nosotros. Fijaos los saltos temporales con vacíos de décadas con los que nos montamos nuestra película.
La época de emigración
Bien, pues en estas 4 décadas, China se abrió al capitalismo y, sobre todo en los últimos 20 se han producido cambios muy significativos. Es cierto que los chinos escapaban de China en el pasado, cuando su país era pobre y Europa o, mejor dicho, occidente era rico, pero la cosa se ha ido equilibrando. Sobre todo en países como España donde cada vez es más difícil prosperar, al menos de la manera que lo entienden los chinos que es el emprendedurismo.
En la mentalidad occidental, lo habitual es buscar un plan de carrera, crecer en una multinacional o directamente opositar a un puesto en la administración pública… También lo hacemos así cuando emigramos, muy pocos llegamos a un país desconocido a abrir nuestros negocios.
Estoy generalizando obviamente, para los chinos que emigraron durante la segunda mitad del siglo XX el trabajo por cuenta ajena nunca fue una opción; si siempre analizo los proyectos desde los criterios de deseabilidad y de factibilidad, ni era deseable (no habían cruzado medio mundo para trabajar por un salario mínimo) ni era factible (ya que no contaban con educación media o superior ni un conocimiento del idioma suficiente como para ascender en una empresa local).
Lo suyo era la iniciativa privada. Y me habréis escuchado repetir que, al contrario de lo que pensamos, los chinos son hombres de negocios muy mediocres, pero tienen muy claras una serie de normas básicas que funcionan en todos los rincones del mundo: que sólo hay 3 variables importantes para poner un negocio, localización, localización y localización, que no tienes que ser simpático, ni entender la cultura local… Sólo tienes que ser más barato que el de al lado y que ceteris paribus, en igualdad de condiciones, gana el que trabaja más. Y con estos preceptos bien claros, los chinos han hecho dinero, mucho dinero, fuera cual fuera el país al que emigraran.
La tornas cambian
¿Qué es lo que ha pasado en las últimas dos décadas, principalmente en la última década? Que en China había más oportunidades que en cualquier país occidental. Hemos visto números increíbles para una economía tan grande, crecimientos de dos dígitos durante muchos años. China era un lugar donde escupías al suelo y crecía una flor. Y en España, en occidente en general, hemos vivido años realmente malos.
Pero vayamos a las cifras porque he ido a buscarlas al instituto nacional de estadística.
Básicamente lo que dicen las cifras desde el año 99 (no tengo datos anteriores pero sería similar) es que el aumento de emigrantes chinos a España crece entre un 20% y un 40% anual… Lo cual es una brutalidad. Y a partir del año 2010, que recordemos es cuando se empieza a sentir la crisis en España, el aumento de ciudadanos chinos desciende hasta situarse en torno a una media de un 3% anual.
Los chinos no vienen en contenedores como sucedía hace décadas, de hecho ya no vienen porque les falte trabajo en su país y en España vean una salida al túnel como sí pasaba hace 40 años.
Y alguien me dirá, «bueno, pero es que en los últimos 10 años sigue habiendo ese 3% de aumento anual de inmigrantes chinos». Sí, es cierto, China es un país muy grande, sigue habiendo gente descontenta que desea empezar una nueva vida en otro lugar. También hay españoles como yo que se van a vivir a los lugares más variopintos, pensad que España es un país diminuto al lado de China, pero además de esto, yo achacaría ese 3% a otras razones.
¿Por qué emigran los chinos?
Primero, desde que China se ha enriquecido, España se ha convertido en un destino estudiantil importante. Creo que no hemos aprovechado la oportunidad ni sabemos vender nuestro idioma, estamos a años luz de lo que facturan por este ámbito países como EEUU, Reino Unido, Canadá o Australia, nuestro nivel universitario es realmente bajo, pero nuestras escuelas de negocio están entre las mejores del planeta y, por mal que lo hagamos, nuestro idioma es relevante a nivel mundial con lo que se ha producido una nueva oleada de inmigrantes por este motivo, algo prácticamente inédito en décadas anteriores.
Siento si suena crudo algunas cosas que digo, España es un lugar fantástico, no nos cansamos de repetir lo bien que se come y se vive, tenemos cosas sensacionales, pero a veces echo en falta crítica constructiva para mejorar.
Vale, os decía que la industria de la educación justifica una buena parte de esos nuevos emigrados. En segundo lugar, España es/era un país relativamente bien considerado como retiro dorado: Sol, seguridad jurídica, una buena sanidad y una Golden Visa que el gobierno creó para atraer a todo tipo de chinos que millonarios chinos que quisieran usar España para obtener acceso a los 26 países del tratado Schengen.
De nuevo, perdimos una oportunidad enorme, el visado y la burocracia española ofrecían peores condiciones que Portugal, Grecia o Chipre por ejemplo pero… sí ha habido un goteo de inmigrantes por este concepto.
Y en tercer lugar, el tema menos hablado, más tabú y probablemente el más importante que explica el crecimiento inmigratorio durante estos años: Las regularizaciones. Es decir, los datos del INE no explican recién llegados más allá de las excepciones que hemos comentado, explican nuevos inscritos, que no es lo mismo.
Llevo muchos años fuera de España, no conozco la situación del momento pero en su día, un buen porcentaje de inmigrantes chinos, residían en España sin documentación. Más allá de los casos que conozco, durante mucho tiempo ha sido escandalosa la desproporción entre las cifras oficiales de chinos en España y la realidad que podíamos observar en el día a día. Cómo llegaron y cómo sobrevivían lo dejamos para otro episodio pero, repito, gran parte de estos nuevos inscritos, no son recién llegados, son recién regularizados.
Recuerdo cuando empecé a viajar a España con mis socios chinos, amigos, etc. Alucinaban viendo la cantidad de chinos que vivían allí… Y de alguna manera se indignaban, porque en aquella época no era sencillo conseguir un visado. Teníamos que manipular datos, pedir favores y al llegar a España decían… «¿Y cómo ha entrado toda esta gente?»
Motivos para no volver a China
Bien una pregunta que quizá os hacéis es, vale, venían hace 20 años hace 30 y ahora no tanto… bueno, pero y ¿por qué no se van, por qué no vuelven a su país?
Primero, pensad que muchos de ellos han echado raíces, sus hijos van al colegio, son esos chinos a los que a veces discriminamos pero en ocasiones hablan mejor español y peor chino que yo, son españoles en toda regla más allá de sus rasgos.
Segundo, porque han hecho dinero aquí, no les ha ido mal… Que ahora no haya tantas oportunidades no significa que sea sencillo desmontar todo lo que tienes y moverte, ya lo hicieron una vez. Lo digo por experiencia. Yo ya no tengo la energía para irme a explorar la India como hice hace 15 años en China, con una mochila repleta de pasión y poco más, una cantimplora vacía y a alimentarse con rebanadas de ilusión y ya.
Y después, pensemos que estas personas se han estancado relativamente, son capaces de adquirir nuevos negocios quizá, pero en general, profesionalmente se han quedado muy atrás. En China serían carne de cañón, no conocen China. Esto me lo encuentro con algunos de mis clientes que contratan chinos en España y no siempre sale bien. Hay de todo, pero esta gente se enfrentan a un país desconocido para ellos. De nuevo, no pensemos que no ha pasado nada en China en los últimos 20 o 30 años. La China que dejaron es un país completamente diferente a la China de hoy.
Y después, mis socios chinos cuando vinieron a España y vieron estas comunidades de chinos, me dieron una razón, que no sé cuánto peso tiene en la decisión final pero me parece importante a considerar. Hay una cuestión de reputación, de orgullo, lo que los chinos llaman «cara». Ellos se fueron de China haciendo una apuesta muy fuerte, jugándoselo todo y durante décadas les fue mucho mejor que a los familiares que se quedaron: ganaban dinero, se compraba coches caros, volvían a casa por año nuevo con regalos para toda su familia, presumían de sanidad gratuita…
Os parecerá una tontería pero presumían de hijos, los chinos emigrados volvían a casa de los abuelos con 3 o 4 niños mientras que sus hermanos o primos sufrían la ley del hijo único… Aunque no se haya presumido de forma ostentosa o hiriente, no es fácil de repente dar un paso atrás y volver a empezar desde cero en el lugar del que saliste hablando pestes.
También os digo, hablando bien de España, igual que yo me he acostumbrado a vivir en China y ahora no podría empezar de cero en España… A muchos chinos les pasa lo mismo. Han encontrado su lugar en el mundo. Algunos de ellos valoran muchísimo España por muchos motivos, la seguridad social que tanto criticamos, yo el primero, es un motivo enorme que hace que la gente se quede. Lo valoran porque es algo que no existe en su lugar de origen.
En fin, no quiero ser injusto porque hay explicaciones de todo tipo pero quería dar respuesta a la pregunta “¿Por qué vienen los chinos?” explicando precisamente por qué ya no vienen, por qué en todo caso venían.
Siendo constructivo, diría que pasemos de pantalla ahora que hay otras oportunidades, por ejemplo, con los nómadas digitales. España es uno de los lugares preferidos por estas personas y sin embargo hemos estado muy lentos para promover medidas atractivas para ellos. Madrid, es una de las ciudades más atractivas del mundo ahora mismo y está muy desaprovechada en este campo, Barcelona es uno de los mayores hubs europeos para start-ups, Andalucía, Canarias… en general toda la costa española es lugar de encuentro de este tipo de profesionales.
Ojalá la política esté rápida en este punto y se aproveche la oportunidad.
Os dejo con un proverbio chino un pequeño homenaje a todos aquellos emigrantes que salieron de su hogar sin saber lo que les depararía el destino: “No puedes guiar al viento pero puedes cambiar la dirección de tus velas”.
Gracias y hasta pronto.