Ya hemos hablado en anteriores ocasiones acerca de la crisis del transporte que estamos viviendo y sobre cómo los precios están disparados.
Cuando parecía que la cosa no podía ir a peor, un nuevo problema ha surgido y amenaza con complicar aún más las cosas. Esta vez el culpable ha sido un brote de coronavirus que ha aparecido en el puerto de Yantian, en China.
Y ya hemos visto en anteriores ocasiones como un simple hecho aislado puede afectar de forma global al transporte de mercancías. Y es que todo recordamos lo sucedido con el carguero atascado en el Canal de Suez.
El caso es que el puerto de Yantian es el puerto individual más grande de China, por lo que estamos hablando de unos volúmenes de carga realmente grandes.
Debido a los brotes de coronavirus en sus trabajadores, el puerto se vió obligado a cerrar durante varias semanas, lo que ya ha provocado unos efectos peores que los que provocó el atasco del Canal de Suez.
Con este panorama, mucho tráfico marítimo ha tenido que desviarse a otros puertos, pero hay que tener en cuenta de que la mayoría de ellos ya se encuentran al límite debido a la alta demanda que venimos arrastrando desde hace meses.
Se estima que en los próximos días el puerto comience a recuperar su ritmo normal, pero el daño ya está hecho. Probablemente tendrán que pasar varias semanas hasta que todo el tráfico y la congestión provocada sea absorbida.
Por el momento, las tarifas siguen creciendo y parece que seguirán en niveles récord durante bastantes meses, por lo que solo queda esperar que no surjan nuevos imprevistos que dañen más un año que quedará marcado debido a la cantidad de problemas inesperados que han surgido en el transporte mundial.